Qué es el hígado graso y los problemas de salud que conlleva
Te han diagnosticado hígado graso y no le das mucha importancia al hallazgo. Debo decirte que te equivocas, tener el hígado graso puede desencadenar una cirrosis o un cáncer de hígado.
Por qué tengo hígado graso
El hígado graso es una dolencia relacionada con el sobre peso, colesterol alto, sedentarismo y una dieta inadecuada.
El hígado tiene una acumulación excesiva de grasa, dicha acumulación le impide su correcto funcionamiento y llega un momento en que no la puede metabolizar.
Las células del hígado empiezan a sufrir y a producir lesiones llamadas fibrosis. Estas lesiones le impiden hacer su trabajo, limpiar y filtrar la sangre para depurar el organismo. Empieza a fallar y pone en peligro tu salud.
La periodontitis puede estar detrás
Las encías dañadas son una puerta de entrada de bacterias, al detectarlas nuestro sistema inmune se activa favoreciendo la inflamación y el estrés oxidativo. Si esta inflamación se mantiene en el tiempo, aumenta el riesgo de hígado graso ¿por qué? Las bacterias pueden alterar la microbiota intestinal, esto repercute en el metabolismo de la glucosa y favorece el hígado graso.
La importancia de la microbiota en su tratamiento
Es de vital importancia mantener nuestro aparato digestivo en buenas condiciones. El intestino forma parte de ese aparato digestivo y es más importante de lo que crees. Si sufres colon irritable debes cambiar tu dieta, incluir probióticos en tu dieta.
¿Tiene síntomas el hígado graso?
No siempre provoca síntomas, por ese motivo cuando es detectado lo encontramos en un estadio avanzado.
Pero puedes notar dolor en la parte derecha del abdomen, que la comida te sienta pesada. A veces va acompañado de fatiga y malestar.
Si no se controla a tiempo puede aparecer hepatitis, cirrosis y cáncer de hígado.
Lo que comes influye mucho
Debes evitar:
Harinas blancas
Azúcar y alimentos azucarados
Pan, pasta, arroz blanco, bollería industrial
Grasas saturadas y trans
Alcohol
Gluten
Carnes rojas
Alimentos que debes incorporar a tu dieta
Alcachofas
Salmón
Nueces y frutos secos en general
Yogur de soja o sin lactosa
Carnes blancas
Legumbres
Verduras y fruta
Huevos
Harinas y cereales sin gluten
Probióticos
Enzimas digestivas
Café con moderación.
Se calcula que entre un 20 a un 30% de la población sufre hígado graso no relacionado con la ingesta de alcohol y existe un gran porcentaje de afectados que desconoce su dolencia.
Puedes evitar que tu hígado funcione mal, además si ya has sido diagnosticado debes cambiar tus hábitos de vida que te han abocado a la enfermedad, seguir una dieta saludable adecuada a tus necesidades, empezar a practicar ejercicio físico, caminar, nadar, bicicleta, correr y ser consciente que el hígado graso es un problema grave que no debemos dejar pasar. Debemos combinar todo lo anteriormente dicho para mejorar nuestra salud, si hacemos algo de deporte, pero nuestra dieta falla, no lo vamos a poder solucionar.